Mujer y Ciencia. Reto 1
REFLEXIONANDO SOBRE EL PAPEL DE LA MUJER EN LA CIENCIA
Me ha llamado la atención, y lo quería compartir en este blog, la información sobre el porcentaje de mujeres dedicadas a I+D en Andalucía por sectores de ejecución. Aunque los datos son de 2017, se publicaron en el año 2020 por el Instituto Andaluz de la Mujer, en el informe "Diagnóstico de la situación de mujeres y hombres en Andalucía 2019", cuya versión en PDF está disponible en el siguiente enlace:
Los datos, que extraigo de la página 56 de dicho informe, son:
SECTOR % MUJERES
Administración Pública 26,60%
Empresas 22,94%
Instituciones privadas sin ánimo de lucro 0,13%
Enseñanza Superior 50,33%
De estos datos destaco lo siguiente: Teniendo en cuenta que la mayor parte del sector Enseñanza Superior pertenece al sector público, juntándolo con el sector Administración Pública, se observa que más de 3/4 partes de las mujeres dedicadas a I+D están circunscritas al ámbito público, mientras que el papel de la mujer en el ámbito privado de la I+D es aún modesto.
Por tanto, en este ámbito geográfico concreto, no solo hay que procurar que más mujeres se dediquen a la Ciencia y Tecnología (STEM, según las siglas en inglés), sino que también en el sector privado se debe potenciar más el papel de la mujer dedicada a la I+D, para que esta brecha de género en el campo de la innovación y desarrollo se vaya cerrando y no haya tanta disparidad entre sector público y privado.
Sería interesante comparar con los datos de otras Comunidades Autónomas para inferir si existen diferencias regionales y obtener resultados globales para el conjunto de España.
No obstante, diversos estudios avalan que en España aún existe una brecha de género en cuanto a profesiones relacionadas con la Ciencia y la Técnica y en el origen de esta desigualdad de género está presente la socialización diferencial de niñas y niños desde edad temprana y la orientación que en los estudios primarios muchas veces se da para dirigir a determinados estudios y profesiones en función del sexo.
Por ello, considero que para superar esta brecha de género es fundamental potenciar una orientación de las niñas hacia estudios de ciencia y tecnológicos desde temprano, siendo fundamental, para ello, las etapas de enseñanza secundaria obligatoria y, sobre todo, el Bachillerato, donde ya se van decantando las opciones preferenciales.
Por tanto, en lo que a Ciencia y Tecnología respecta, potenciar la igualdad tiene dos frentes: uno es el educativo y orientador hacia estas profesiones desde edades tempranas y otro es que el sector privado apueste con firmeza por ir mitigando la brecha que actualmente existe, hasta que desaparezca en un plazo razonable.
¿Y tú qué opinas de lo que he comentado? No dudes en poner tu respuesta.
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